Antecedentes

El 26 de mayo de 2017, la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) publicó la alerta especial N° 338 para hacer de conocimiento mundial, la aparición de una enfermedad viral emergente causada por un virus de la familia Orthomyxoviridae (Ferguson et al. 2014, Eyngor et al. 2014, Bacharach et al. 2016, Del Pozo et al. 2017, NACA 2017, OIE 2017) que afecta a la tilapia cultivada y a la silvestre denominado Virus de la Tilapia Lacustre (TiLV).

El origen de la enfermedad es actualmente desconocido (Dong et al. 2017). Sin embargo, su rápida diseminación ha ocasionado que a la fecha se tengan reportes en trece países como: Israel (Eyngor et al., 2014), Ecuador (Bacharach et al., 2016a; Del-Pozo et al., 2017; Ferguson et al., 2014), Colombia (Kembou Tsofack et al., 2017), Egipto (Fathi et al., 2017; Nicholson et al., 2017), Tailandia (Dong et al., 2017; Surachetpong et al., 2017), Taiwan (OIE, 2017), Filipinas (OIE, 2017), Malasia (Amal et al., 2018), India (Behera et al., 2018), Tanzania, Uganda (Mugimba et al., 2018), Perú (OIE, 2018) y Estados Unidos (OIE,2019).

Dado que resulta ser una amenaza grave para la acuicultura de la tilapia y, por consiguiente, la seguridad alimentaria mundial, minimizar su riesgo dependerá de la implementación de controles preventivos orientados a la bioseguridad y buenas prácticas acuícolas en los centros de cultivo y/o ambientes naturales.

Ante ello, el Organismo Nacional de Sanidad Pesquera – SANIPES logró ejecutar el Plan de Emergencia del Virus de la Tilapia Lacustre durante los años 2018 y 2019, con el objetivo de reducir el impacto del Virus de la Tilapia Lacustre (TiLV) mediante lineamientos sanitarios. Los resultados de este plan se traducen en la actual aplicación de los controles preventivos en los principales centros de producción de semilla a nivel nacional, así como la sensibilización de la cadena productiva respecto de esta enfermedad. No obstante, Sanipes tiene previsto la implementación de un Plan de control ante TiLV en las principales regiones productoras de tilapia, el cual buscará establecer las medidas sanitarias necesarias para mitigar la diseminación y reintroducción del virus, contribuyendo con el desarrollo sostenible de la acuicultura de tilapia a nivel nacional.